A finales de 2018, bajo la Presidencia austriaca, el Consejo de la Unión Europea presentó las conclusiones sobre el Plan de Trabajo en materia de cultura 2019-2022, el cual está estructurado en cinco puntos principales:

  1. Sostenibilidad en el patrimonio cultural, con el fin de garantizar su legado, es preciso desarrollar medidas de seguimiento y actividades de integración que continúen con la línea de actividades que se desarrollaron durante el Año Europeo del Patrimonio Cultural 2018.
  2. Cohesión y bienestar para lograr una orientación centrada en los intereses y necesidades de determinados grupos específicos, como jóvenes, personas de edad avanzada, personas con diversidad funcional, de origen migrante y las personas en situación de pobreza o de privación material.
  3. Un ecosistema que apoye a los artistas y a los profesionales de la creatividad y la cultura, y los contenidos europeos, centrándose en mejorar la movilidad de artistas y profesionales de la cultura.
  4. La igualdad de género es una de las bases de la diversidad cultural, aunque se han hecho avances en esta materia, hay que seguir trabajando por eliminar las diferencias que siguen separando a hombres y mujeres.
  5. Relaciones culturales internacionales, fomentando una mayor concienciación sobre el papel esencial que desempeña la cultura y su impacto socioeconómico, que hace frente a importantes problemas y retos a nivel mundial.