Con motivo de la Presidencia Española del Consejo de la Unión Europea, se ha celebrado en Cáceres, ciudad Patrimonio de la Humanidad, la firma de la ‘Declaración de Cáceres’, respaldada por los 27 Estados miembros de la Unión Europea. A través de este documento, la cultura se convierte en un bien público de carácter esencial y mundial, colocándola en el más alto nivel político.

La ‘Declaración de Cáceres’, cuyo maestro de ceremonias ha sido el ministro de Cultura español Miquel Iceta, consiste en un acuerdo para proteger e impulsar la cultura europea. Según la declaración firmada, «la cultura juega un papel esencial en la construcción de sociedades democráticas y en el desarrollo personal de la ciudadanía: la cultura es esencial para lograr sociedades más sanas, justas, críticas, libres, tolerantes, integradoras e igualitarias”. Además, dicho acuerdo cuenta con una misión fundamental: “Trabajar para que la cultura sea reconocida en sí misma como un nuevo objetivo de desarrollo sostenible”

En este sentido, durante el acto se ha destacado la importancia de la sostenibilidad en el ámbito de la cultura. La ‘Declaración de Cáceres’, supone un gran avance de cara a incluir la Cultura dentro de la Agenda 2030 como 18º Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS).

De este modo, la Presidencia Española del Consejo de la UE ha logrado aglutinar a todos los países de la Unión Europea en torno a un discurso y una estrategia para que la cultura sea una verdadera política de Estado, certificando su papel como elemento indispensable tanto para el desarrollo personal de una ciudadanía libre, crítica, tolerante y heterogénea en su diversidad, como para el propio crecimiento económico de unos países que siguen siendo el referente internacional, también en lo relativo a las áreas artísticas y creativas.

Durante el acto, se ha transmitido un mensaje de absoluta solidaridad con Ucrania y se ha recordado el valor de la cultura durante la pandemia de Covid-19 que sufrimos en 2020.

En palabras de la ‘Declaración de Cáceres’: «La cultura es vida, salud, integración, resistencia y esperanza. La cultura nos une, nos vincula, nos integra. La cultura nos reconoce, nos abriga, nos acoge. La cultura abre puertas, rompe barreras, sana heridas y ofrece caminos para vidas y sociedades mejores. Cultura y vida nunca están separadas, sino que forman parte de un todo.»

Si quieres consultar la ‘Declaración de Cáceres’ al completo, pulse en el siguiente enlace.