El 16 de abril se celebró en La Hulpe (Bélgica) una Conferencia de Alto Nivel con vistas a renovar el compromiso con una Europa social más fuerte, en forma de una Declaración sobre el Futuro del Pilar Europeo de Derechos Sociales.

Esta conferencia sigue a la reciente declaración de Val Duchesse (de 31 de enero), en la que se subrayaba que un diálogo social eficaz en la UE es fundamental para la economía social de mercado europea.

La nueva declaración de La Hulpe fue firmada por el Parlamento Europeo, la Comisión Europea y Bélgica en nombre de 25 Estados miembros de la UE (excepto IE y HU), el Comité Económico y Social Europeo, la CES, SGI Europe, SME United y la Plataforma Social.

La declaración se compromete a seguir aplicando el Pilar Europeo de Derechos Sociales y a seguir reforzando la Europa Social. El texto también propone iniciativas para la futura agenda social de la UE en la próxima legislatura y reafirma el pilar como marco rector de las políticas sociales de la UE.

Contenido de la declaración:

En general, se acordó revisar y actualizar el Plan de Acción del Pilar Europeo de Derechos Sociales en 2025 y proponer nuevas acciones a nivel de la UE para alcanzar los objetivos principales de la UE para 2030 en materia de empleo, cualificaciones y reducción de la pobreza.

En cuanto a los tres capítulos principales del Pilar Europeo de Derechos Sociales, cabe destacar los siguientes:

Sobre la igualdad de oportunidades y el acceso al mercado laboral:
– Proponer nuevas acciones de apoyo al aprendizaje permanente y a una educación y formación de calidad, siguiendo el impulso generado por el Año Europeo de las Capacidades, y actualizar la Agenda Europea de las Capacidades.
– Intensificar las estrategias de la UE en materia de igualdad, antidiscriminación y antirracismo para combatir la discriminación por motivos de sexo, origen racial o étnico, religión o convicciones, discapacidad, edad u orientación sexual a través de un enfoque interseccional.
– Reforzar la capacidad de los Servicios Públicos de Empleo para utilizar los datos y la tecnología digital, reconociendo su papel de apoyo a las políticas del mercado laboral nacionales y de la UE.
– Reforzar las acciones en el marco de la Estrategia de Igualdad de Género y las medidas ambiciosas para apoyar la igualdad de género; cerrar las brechas de género en el empleo, los salarios, las pensiones y los cuidados; combatir la violencia contra las mujeres; y luchar contra los estereotipos de género.

Condiciones de trabajo justas:
– Mejorar el reconocimiento de las competencias y cualificaciones en la UE, incluidas las de los nacionales de terceros países, aplicando el reciente Plan de Acción sobre escasez de mano de obra y de cualificaciones en la UE.
– Proponer iniciativas para prevenir el fraude y los abusos, impulsar la cooperación transfronteriza de las inspecciones de trabajo nacionales, reflexionar sobre el futuro desarrollo de la Autoridad Laboral Europea y mejorar las condiciones de trabajo y de vida de los nacionales de la UE y de terceros países.
– Reafirmar el planteamiento de «visión cero» para prevenir las muertes relacionadas con el trabajo e incorporar mejor los riesgos psicosociales en los marcos de salud y seguridad.
– Garantizar condiciones de trabajo justas en ámbitos clave para la era digital como el teletrabajo, el derecho a la desconexión, la incorporación del principio de «control humano» para la inteligencia artificial en el mundo laboral, la regulación de la gestión algorítmica y la información y consulta de los trabajadores.

Sobre protección e inclusión social:
– Potenciar el aprendizaje mutuo y supervisar mejor la aplicación de la Recomendación del Consejo relativa al acceso de los trabajadores por cuenta ajena y por cuenta propia a la protección social.
– Proponer una visión global de la digitalización y seguir aplicando y complementando el sistema de Intercambio Electrónico de Información de la Seguridad Social.
– Desarrollar una ambiciosa segunda fase de la Estrategia 2021-2027 para los Derechos de las Personas con Discapacidad e integrar la perspectiva de la discapacidad en las políticas de la UE.